Con esta actuación se completan la primera fase que habilita 500 metros cuadrados de los 5.000 totales para la construcción de 20 viviendas sociales.
El concejal de Urbanismo, José Otto Oyarbide, acompañado de técnicos del Servicio de Obras Públicas del Ayuntamiento de Torrelavega, ha estado presente en las obras de demolición de la última vivienda situada junto a los talleres municipales de Campuzano. “Con esta liberación de suelo se liberan en torno a 500 metros cuadrados, en donde estaban ubicadas cuatro viviendas y unos pequeños talleres propiedad municipal”, ha explicado el concejal. Estas fincas forman parte de una parcela total que tiene una extensión de 5.000 metros cuadrados, incluidos los citados talleres.
Con este último derribo se completa en apenas 19 meses las gestiones de expropiación de las viviendas, que permiten al Ayuntamiento dejar de depender de propietarios ajenos al propio consistorio en estos solares, gracias a los acuerdos llegados con los propietarios, así como de unos pequeños almacenes que fueron adquiridos y demolidos el año pasado.
Estas fincas quedan ahora en propiedad municipal, con el objetivo de construir “una veintena de viviendas de protección oficial en régimen de alquiler social”, ha detallado Oyarbide. A este respecto, como ya informó la semana pasada el alcalde, José Manuel Cruz Viadero, “los solares se pondrán a disposición del Gobierno de Cantabria”, ha dicho el edil, una vez se lleve a cabo el derribo de los talleres municipales.
Esta actuación se llevará a cabo una vez se produzca el traslado de estas instalaciones al polígono de Tanos-Viérnoles, un proceso que el equipo de gobierno espera “se pueda agilizar lo antes posible”. Como explicó Cruz Viadero la semana pasada, en los próximos días saldrá a licitación el proyecto de construcción de estos nuevos talleres.