Esta propuesta, que de momento solo es una idea a valorar, vendría a complementar la búsqueda de soluciones al tráfico en la Avenida de Solvay, que se verá aligerada de circulación de vehículos con el vial entre Barreda (Sniace) y Viveda.
La posible salida de la Autovía Santander-Torrelavega en Barreda quedaría enclavada entre los campos de fútbol del Barreda y del Rinconeda.
El equipo de gobierno municipal ha apostado claramente por el vial entre Barreda, a la altura de Sniace, y Viveda como principal solución al tráfico rodado en la Avenida de Solvay en Barreda, pero además de esto, y a través de la Revisión del Plan General de Ordenación Urbana se están analizando otras propuestas secundarias que podrán ser valoradas como posibles soluciones adicionales.
“Estamos estudiando la posibilidad de solicitar a Fomento una salida de la Autovía Santander-Torrelavega en Barreda, para que aquellos vehículos que se desplazan a Suances o Santillana desde la capital no tengan que llegar a entrar al ‘Donuts de La Inmobiliaria’ ni pasar por toda la Avenida de Solvay”, ha manifestado Jose Otto Oyarbide, concejal de Urbanismo y Vivienda, y máximo responsable del seguimiento de la Revisión del PGOU.
Para tener una mejor idea del tráfico de dicha autovía y de la Avenida de Solvay, según los datos del Ministerio de Fomento, la Autovía A-67 soporta 51.000 vehículos al día, mientras que el tramo de la N-611 comprendido entre el ‘Donuts’ de entrada a la ciudad y la carretera CA-131, a la altura de Solvay, soporta unos 19.000 vehículos al día. Este valor supone un efecto barrera muy importante para el pueblo de Barreda, tanto por la contaminación acústica como atmosférica, pero sobre todo desde el punto de vista de la seguridad vial y de la comunicación entre sus márgenes.
El borrador de aprobación inicial de la Revisión del PGOU reserva suelo para la construcción de un nuevo nudo en el tramo de la Autovía A-67, que pierde parte de sus funciones actuales como consecuencia de la construcción de la variante entre los enlaces de Barreda y Sierrapando, prevista por el Ministerio de Fomento, aproximadamente entre el límite con Rinconeda y “Los Ochos”.
Según ha explicado Oyarbide, “esta nueva salida propuesta en el borrador del nuevo PGOU, conectaría la Autovía Santander-Torrelavega con la Avenida de Solvay, a la altura de la Iglesia de Santa María de Barreda, y la rotonda que sirve de intersección entre la N-611 y la CA-131, dirección Queveda y Suances, pasando por el puente de Solvay”.
Con estas infraestructuras se puede desviar el tráfico de paso que hoy absorbe Barreda, especialmente el de vehículos pesados que acceden a las industrias de la zona y los turismos que se desplazan a las playas de Suances y la zona de Santillana del Mar.
“Una vez reducido el tráfico de paso, ya sea solo gracias al vial Sniace-Viveda, o también a esta nueva posible salida de la autovía, que a día de hoy solo es una propuesta, se podrá realizar un tratamiento más urbano de la Avenida de Solvay favoreciendo su permeabilidad transversal y la calidad de vida de los vecinos y vecinas de Barreda”, ha manifestado Oyarbide.
El nuevo enlace requiere ser ajustado a través de un estudio detallado de la topografía y de las condiciones que pueda requerir el Ministerio de Fomento como titular de la infraestructura. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, las distancias mínimas entre enlaces y la existencia en la zona de un paso a inferior peatonal.